Cuando el sabelotodo ataca

April 28, 2016 17:52 by Zona Empleo EDH

 

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El sabelotodo es aquella persona que siempre trata de imponer su opinión ante los demás y muchas veces puede tener una actitud negativa en los grupos de trabajo.

En las oficinas hay todo tipo de gente, uno puede encontrar personas atentas, buenos trabajadores, empleados responsables, pero así como hay mucha gente buena, también hay personas nocivas que solo traen negatividad al lugar de trabajo.

Entre ellos está el sabelotodo, aquel que quiere imponer constantemente sus ideas y no acepta las propuestas de otros. El sabelotodo puede ser una oportunidad en el grupo de trabajo, puede ser alguien a quien le puede preguntar lo que sea, pero también esta puede ser un arma de doble filo.

Este tipo de persona quiere imponer sus ideas a los demás y esto lo convierte en un personaje con el que se vuelve difícil relacionarse. Esta es gente que siempre está tratando de monopolizar las conversaciones y, por ende, desestima las ideas distintas a las suyas.

El problema que se genera normalmente es que están buscando tomar decisiones  sin antes consultar a otros o incluso toman decisiones sin pensar en las repercusiones que éstas pueden generar en otros. Son estas imposiciones las que, con frecuencia, producen descontento, con otros compañeros de trabajo y también con clientes de la empresa.

Comúnmente son considerados como malos oyentes y a menudo piensan en lo que van a decir después, pero no piensan en lo que están diciendo. Lo que se vuelve complicado es que debido a su forma de pensar es difícil hacerles ver que sus ideas no son las mejores, una vez generan una opinión, no hay forma de hacerles cambiar de idea.

Uno de los factores que distinguen a etas personas es lo frustrante que pueden volver el ambiente de trabajo. Una de las razones es que hablan más de lo que escuchan, cuando este tipo de profesional se presenta en las conversaciones da la impresión que las opiniones de los demás no están siendo recibidas.

Quizás la mejor forma de describir a la gente que cree que lo sabe todo es que son gente de mente cerrada, y cuando una empresa tiene a un colaborador como este solo significa que hay un grave obstáculo para el proceso creativo de los equipos de trabajo.

Algunas de las características que se presentan con los sabelotodo es que son obstinados, agresivos, bruscos y arrebatados; esto es debido a que buscan ganar discusiones con el resto de sus compañeros de trabajo, y esto puede ser interpretado como un comportamiento intimidatorio.

El hecho de que uno tiene a un compañero sabelotodo no debería de angustiar a nadie, hay formas para poder lidiar con ellos y evitar la frustración que uno podría vivir:

1. Acudir a la compresión
Estos son compañeros que pueden ser irritantes, pero en muchos casos estas actitudes se generan de un tema de confianza o algún problema personal más profundo que la persona pueda tener. Es por eso que es recomendable tener empatía en lugar de enojarse.

2. Saber cuáles batallas pelear
No siempre se van a ganar las batallas, y con un sabelotodo es imposible ganar. Es por eso que lo mejor que uno puede hacer para llevar la fiesta en paz es “dejarlos ganar” y simplemente ignorar lo que estén diciendo para evitar involucrarse en una larga discusión sin sentido.

3. Predicar el buen ejemplo
Es importante dar a conocer que no siempre se estará en la razón, cuando uno admite que se ha equivocado también se está demostrando que la persona sabelotodo podría estar equivocada. Hay que ser flexible con las ideas y abierto a otras opiniones.

4. Mantente firme a los argumentos
La mejor forma de combatir con el sabelotodo de la oficina es mantenerse firme ante los argumentos. No hay nada peor que demostrar debilidad o duda sobre algo ante un sabelotodo, puesto a que ellos harán lo posible por querer ganar esta discusión. Es recomendable que si se está exponiendo un tema o un punto en un grupo de trabajo se de siempre respaldar lo que se dice con documentación para que, de esta forma, el sabelotodo no pueda refutarlo.

5. No perder el sentido del humor
Los sabelotodo pueden ser defensivos y a veces hasta agresivos, y lo último que uno desea es ponerlo contra la pared. Pero es mejor que cuando este tipo de persona empiece a acaparar la conversación uno pueda tratar la situación con humor.

6. Hacer preguntas de prueba
Es recomendable hacer interrogantes para conocer cuáles son las fuentes que respaldan la opinión del sabelotodo. Es bueno hacer esto de manera respetuosa, con el fin de conocer si lo que dice esta persona es verdad o simplemente está tratando de impresionar a los demás.

7. Habla con el sabelotodo
Si esta persona se está volviendo muy negativa en el espacio de trabajo, será bueno hablar con ella y darle retroalimentación constructiva sobre su comportamiento. De esta forma la persona podría reconocer su actitud e incluso expresarse diferente en el grupo de trabajo.

8. No involucrar al jefe a menos que se vuelva una amenaza
Estos son problemas que se pueden solventar adentro del equipo de trabajo y no es necesario que se involucre al jefe para resolverlo. El único motivo por el que se deberá llevar el problema al jefe es si esa persona esta lastimando la estabilidad del equipo laboral.

 

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Categories: Economía y trabajo | Formación profesional

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